Este sábado la NASA lanzó el primero de dos satélites que ayudarán a los científicos a entender cómo se atrapa el calor en la Tierra. El artefacto, del tamaño de una caja de zapatos, tiene como objetivo entender cómo el vapor de agua, las nubes y otros elementos atmosféricos evitan que el calor se irradie hacia el espacio. El proyecto permitirá que los datos recopilados sean una base de datos para modelos climáticos que ayuden a mejorar las predicciones sobre la crisis climática. El organismo dijo que la energía térmica que absorbe la Tierra se mueve hacia los polos, irradiando el calor hacia el espacio y este calor está en ondas infrarrojas que nunca han sido medidas sistemáticamente.